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| Como en los viejos tiempos, pero con técnicas de construcción actuales. Solo cincuenta unidades disponibles. |
Una subasta de la firma Barrett-Jackson fue el lugar elegido por el constructor Shelby American para presentar su más reciente lanzamiento. Cincuenta unidades serán construidas del Cobra 289 FIA, celebrando las cinco décadas del modelo original.
En 1964, el Shelby Cobra participó por primera vez en un Campeonato del Mundo de Constructores, compitiendo frente a frente con marcas de la talla de Jaguar o Aston Martin. La primera vez que un constructor norteamericano se enfrentaba al legado europeo.
Para recordar las viejas glorias, Shelby American anunció en la pasada subasta de Barrett-Jackson que construirá una serie de cincuenta unidades del 289 FIA, replicando fielmente la estética y dimensiones, pero con técnicas de construcción actuales.
El diseño seguirá la línea de los modelos de competición, con la carrocería en "Azul Vikingo" con franjas amarillas y los circulos blancos para los números de acuerdo a las medidas homologadas por la FIA. Además encontramos un interior con ambiente de época, con volante de madera extraible.
Por fuera destaca por el arco de protección para el conductor, los pasarruedas ensanchados y las cubiertas Good Year Eagle con llantas que simulan las de los 60'. El chasis fue reforzado, y los frenos cuentan con tecnología actual.
La carrocería podrá ser de fibra de vidrio o -más costosa- de aluminio. Con este segundo material y un motor V8 Ford de 289 pulgadas -como debe ser- pesa 950 kg. Pero, como en su origen, se vende sin motor ni transmisión, para que cada dueño elija el small-block V8 que más le guste.
En palabras de John Luft, presidente de Shelby American: "Los Cobra FIA fueron pilotados por leyendas del automovilismo como Ken Miles, Phil Hill y Bob Bondurant, que lo llevaron al círculo de ganadores. Combinar una mecánica americana robusta y poderosa con un chasis liviano fue brillante. Esta fórmula de Shelby sigue siendo empleada en deportivos actuales".
